Sanabria-Carballeda
La Asociación de Pesca detecta visones americanos en Ribadelago y Galende
El colectivo pide a la Junta el control de esta especie invasora, que ha sido avistada en los ríos Tera y Negro
22.02.2013 | 11:18
ARACELI SAAVEDRA La asociación de Pesca de Sanabria y Carballeda pide a la Junta el control de ejemplares de visón americano que han sido avistados en diferentes puntos de la cuenca alta del río Tera, dentro del parque natural del Lago de Sanabria.
El presidente, Manuel Mateos Pedrero, precisó que hay constancia de su presencia en zonas muy sensibles como Ribadelago y Galende, y en cotas más bajas, situadas fuera del espacio protegido, en las inmediaciones de la presa de Castellanos.
Los pescadores también señalan al río Negro como otro foco donde el visón americano se ha adaptado y se está extendiendo con rapidez.
El control del visón americano se está llevando a cabo, desde hace tiempo, en los ríos de la otra vertiente de la sierra, en los ríos de la Cabrera leonesa, donde la Guardería Medioambiental instala trampas que son revisadas de tiempo en tiempo para comprobar sus resultados.
Además de esta especie alóctona y sumamente perjudicial, los pescadores ribereños reclaman el control de cormoranes, otra especie foránea que merma la población de trucha.
La asociación dará traslado de este problema a la Consejería de Medio Ambiente para que intensifique las campañas de captura de estas dos especies en el curso del Tera a su paso por la comarca.
Este será uno de los principales temas que la asociación abordará en la reunión de socios del próximo domingo, día 24 a las siete de la tarde, en el salón de Plenos de Puebla. El sábado se celebrará en Ribadelago una charla coloquio con responsables de las asociaciones de pescadores de León y de la Junta de Castilla y León, donde se expondrán los problemas que registra la pesca y el estado de conservación de los cauces y las especies.
Precisamente la presencia de ambas especies, grandes predadoras de la vida piscícola, es uno de los temas que preocupa al colectivo de pescadores comarcales. Entre los problemas puntuales destacan, además, la falta de limpieza de los ríos y que continúan los vertidos de aguas residuales al cauce del Tera, desde su misma cabecera. Una situación que los responsables del colectivo califica de «tercermundista», y que sigue sin implantarse una solución satisfactoria.
Las barreras en los cursos cursos fluviales, como de la presa de Tinico en el Tera, a su paso por Puebla, genera problemas para el remonte de las truchas. Como propuesta, la asociación pide que se corrija la construcción de esta presa bien con una escala o rebajando la altura.
Los pescadores ribereños están dispuestos a suscribir un acuerdo con Confederación Hidrográfica del Duero, la Junta de Castilla y León y los ayuntamientos interesados para colaborar en reconstruir presas tradicionales, tipo escollera, que faciliten el remonte y la retención de agua para la freza de la trucha. Para la asociación la mejora de los ríos a su paso por los casco urbanos de los pueblos «debía plantearse como una de sus prioridades».
La asociación pedirá el control de construcciones irregulares, como casetas y refugios, junto a los cauces de los ríos y una mayor limpieza de las zonas de paso. La asociación de Pesca promoverá un curso de iniciación para niños en el mes de mayo y el mes de junio con grupos reducidos, para aprender fundamentalmente las técnicas de pesca. El colectivo de pescadores ha trasladado su desacuerdo con el incremento de las tasas de la licencia de pesca porque esa tasa no se traduce en mejoras directas en la conservación del río, recalcó el presidente Mateos.
La solicitud de licencias se está complicando porque no se remite el impreso como antes sino que hay que solicitarlo a través de internet «lo que es un problema muy grande para las personas mayores que no saben cómo tienen que solicitarlo». En este aspecto el presidente reclama que se habilite un servicio donde se pueda solicitar la licencia de pesca en las oficinas de la Casa del Parque del Lago de Sanabria.
La asociación pedirá que todas las zonas vedadas se conviertan en tramos libres de pesca sin muerte, ya que los acotados «son perjudiciales y tenían que desaparecer todos». Los tramos vedados son en estos momentos un punto de pesca donde solo entran los furtivos, donde solo crecen cuatro truchas y crece la maleza en las zonas de paso».
Manuel Mateos reclama que se haga un estudio y se lleve un control de las poblaciones piscícolas en toda la zona. Pone de manifiesto, no obstante, que «me consta que la Guardería lo está haciendo», pero reclama que «ese control y esos resultados se tengan en cuenta».
La asociación planteará que se autorice el cebo natural entre los pescadores ribereños «que es todo un arte que pueden aprender los niños de los pescadores más mayores».
Por último la asociación trasladará su desacuerdo con el cupo de bogas, seis para esta temporada, porque si «en el Duero no es una especie abundante, en estas zonas del Tera sí son abundantes».